Es totalmente normal que cuando estamos en la universidad nos preocupemos por las materias, trabajos, fiestas, amigos, actividades que haremos en las vacaciones y mucho más. Por lo general este tipo de responsabilidades son las más comunes en aquellos estudiantes que cuentan con total apoyo económico por parte de sus padres u otros familiares. Pero ¿No has considerado en crear un plan de finanzas personales para ver cuál es la mejor forma de gastar el dinero?
Sin embargo, en todas las universidades no todos los estudiantes son financiados por sus padres. Sino que también encontramos un gran grupo de alumnos que deben trabajar al menos medio tiempo, con el fin de pagar su educación y cubrir ciertos gastos personales. Por lo que buscan la manera de estirar su sueldo lo mayor posible.
Pero ¿Has pensando en crear un plan de finanzas personales para estudiantes? De no ser así, déjame decirte que la universidad es la mejor etapa para aprender a tomar decisiones sobre necesidades específicas y cómo debemos categorizar nuestros gastos.
Define tu promedio mensual de ingresos y gastos
Inicia planificando cuál será tu estrategia financiera en el mes dentro de tu plan de finanzas personales, de hecho, definir tu promedio mensual de ingresos y gastos es algo que deberíamos hacer antes de empezar la universidad.
En una hoja anote todos los gastos grandes que pueda llegar a tener, como matriculaciones, libros, comida, alquiler, transporte, etc…
Si tu sueldo no te alcanza y debes hacer un préstamo, debes añadirlo a tu planificación mensual, al hacer esto vas a poder ahorrar dinero para ir cubriendo gastos que no estaban planeados.
Ten presente que al definir tu promedio mensual, vas a poder saber cuánto te queda para poder participar en actividades recreativas, así como ir a eventos, fiestas, o simplemente para salir con tus amigos.
Normalmente los padres pueden llegar a convertirse en nuestros mejores tutores financieros, enseñándonos todo sobre los principios básicos de administración financiera, un consejo que puede serte de gran ayuda, es hablar con primos o amigos que ya están en la universidad, ellos pueden decirte los valores aproximados de gastos que tienen cada mes.
Hazte una plantilla
La mejor forma de crear una plantilla de finanzas personales es usando una hoja de Excel, allí los cálculos se hacen de forma automática y el control de gastos va a ser mucho más exacto.
Si no sabes cómo hacer una plantilla, puedes optar por buscar en internet y descargar cualquiera de manera gratuita, así no vas a tener que aprender a usar ciertas formulas o funciones de Excel, las cuales para la mayoría de personas puede ser muy tedioso.
En la plantilla que obtengas debes ingresar datos de ingresos y gastos (Incluyendo fecha, concepto, precio y que cantidad adquiriste); además de ello, al ir desglosando todos los datos se van a actualizar de forma automática, así que no te preocupes por los cambios que debas hacer.
Marca tus objetivos financieros
Los objetivos financieros no solo se realizan en ámbitos profesionales o financiero, sino que también pueden ser personales, así que al establecer que es lo que queremos y cómo vamos a distribuir nuestros gastos, vamos a poder conseguir:
- Libertad financiera.
- Poder divertirte y liberar estrés estudiantil.
- Cubrir más gastos sin tanto esfuerzo.
Es importante que tengas en claro que hasta ahora podemos diferenciar entre los objetivos generales y los que tenemos en concreto, en ambos casos hay que establecerlos por separado (Según tus necesidades).
Mantén un seguimiento semanal
Al llevar un control semanal, vas a poder definir a mediano plazo cuales son los gastos que tuviste en el mes, y si hay una segunda manera de economizar.
Los gastos semanales te ayudarán también a saber que presupuesto te queda para el resto de mes y como debes distribuirlo.
Crea tu cuenta ahorro
Cuando tenemos todo el dinero en efectivo, puede que se nos haga más tentativo gastar todo el capital que disponíamos para cierto periodo de tiempo, así que al guardar un poco en una cuenta ahorro, puede llegar a generarnos más seguridad financiera, evitando entrar en presión social y gastar más dinero del que deberíamos.
Este buen hábito nos puede ayudar para ahorrar y evitar derrochar el dinero en cosas que no son necesarios, considere mantener el dinero en su cuenta de ahorros antes de destinarlo a otras cosas no prioritarias.
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