Ante la temporada de exámenes en la universidad, es inevitable sentir angustia y nervios. Y esto es algo normal, pues estamos ante la incertidumbre de lo que se nos pueda presentar al momento de la evaluación.
No obstante, debemos preocuparnos cuando este nivel de ansiedad influye sobre nuestra capacidad de concentrarnos en las evaluaciones, nuestra capacidad de memoria o incluso en nuestra rutina diaria; por ello, dedicamos este post a saber identificar cuándo la ansiedad está presente y cómo controlarla durante estas etapas.
¿Cómo saber si tengo ansiedad?
La ansiedad y los nervios generan una serie de efectos a nivel psicológico, físico y emocional. Algunos de los síntomas que podrías experimentar si tienes ansiedad, son:
A nivel psicológico:
- Pensamientos negativos.
- Bloqueo mental o pérdida de memoria temporal.
- No poder tomar decisiones en determinado momento.
A nivel físico:
- Insomnio.
- Dificultad para concentrarse.
- Dolores de estómago o de cabeza.
- Náuseas al momento de presentar el examen o incluso vómitos.
- Sensación de nudo en el estómago o ganas incontrolables de ir al baño.
A nivel emocional:
- Inquietud.
- Nerviosismo constante.
- Preocupación excesiva.
- Enojo constante por cosas sin sentido.
Si tienes algunos de estos síntomas, probablemente estés pasando por una etapa de ansiedad.
¿Por qué estoy en este estado?
La ansiedad y los nervios por la temporada de exámenes es una reacción natural que se puede experimentar cuando, como estudiantes, nos anticipamos a situaciones de estrés o incluso miedo. Puede que lo experimentes por haber tenido malas experiencias en el pasado, como bloquearte o haber reprobado un examen muy importante.
Probablemente también existan muchos pensamientos negativos respecto de la asignatura, porque la veas algo complicada, o porque piensas que el instructor es muy estricto y pondrá preguntas muy difíciles de contestar en el examen.
En este sentido, se trata de algo que viene de la mentalidad y que se puede controlar con algunas prácticas. Sin embargo, es importante distinguir la ansiedad con la preocupación por no haber estudiado lo suficiente o con haber tenido un mal día, ya que son situaciones completamente distintas.
¿Qué hacer antes de los exámenes?
Si crees que estás sufriendo de nervios, puedes intentar algunas de las siguientes prácticas, antes de presentar el examen.
- Pon en práctica técnicas de estudio que te ayuden a sistematizar el contenido que deseas estudiar y encuentra estrategias para memorizar o entender más fácilmente.
- Estudia con antelación, no pretendas entender todo en sólo unas horas previas al examen.
- Estudia en lugares tranquilos y relajados, de modo que puedas concentrarte. Evita distraerte mucho con dispositivos electrónicos.
- Habla con el profesor acerca de la temática y la estructura del examen, a fin de que estés seguro del contenido que se presentará en el examen y puedas prepararte de forma correcta.
- Aprende y pon en práctica técnicas de relajación tales como la respiración profunda, relajar los músculos o pensar en cosas positivas. Esto será útil si te bloqueas en os exámenes.
- Por último, no olvides seguir con tu rutina, comer bien, incluso hacer ejercicios y dormir lo necesario los días previos al examen, para evitar situaciones de estrés y desgaste físico.
Si crees que tu situación de ansiedad es muy complicada, entonces recurre a ayuda profesional para recibir orientación más especializada.
¿Qué hacer durante los exámenes?
Una vez que te hayas preparado correctamente, no significa que la ansiedad no pueda atacarte durante el momento del examen. Ahora será necesario poner en práctica lo siguiente para contrarrestar la ansiedad el día del examen.
- No pierdas la calma y controla tus pensamientos desde el principio. Puede que al mirar el examen comiences a pensar que todo saldrá mal, pero es allí donde debes poner en práctica tus técnicas de relajación. Puedes incluso hablar contigo mismo con frases como “calma, todo va a salir bien”, “estoy preparado y puedo hacerlo” o “concéntrate, tú sabes las respuestas”.
- Lee cada pregunta detenidamente, si tienes dudas sobre algún planteamiento, aclara con el instructor y luego comienza por contestar las que consideras más fáciles.
- Si te bloqueas en algún punto, pasa a la siguiente pregunta y continúa respondiendo en clama y con seguridad.
- Finalmente, si lo consideras necesario, lleva un reloj en el que puedas estar al pendiente del tiempo que llevas en el examen, pero, si esto te causa ansiedad, no lo hagas.
No estás solo, hay otros estudiantes con ansiedad
Como aporte final, es necesario que sepas que no eres la única persona que puede estar sufriendo ansiedad cuando se acercan las temporadas de exámenes. Existen muchos estudiantes que pueden experimentar esta sensación.
Lo mejor que puedes hacer es contar con grupos de estudio en los que puedas compartir tus experiencias, de este modo establecerás alianzas e incluso pueden hacer rutinas que les ayuden a superar juntos esta situación.
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