Pamplona es la capital de Navarra, y viene a ser uno de los receptores de turismo más importantes de la parte norte de España. Vivir en Pamplona significa estar en una ciudad acogedora y sobretodo moderna, su casco antiguo, la ciudadela y las emblemáticas calles con excelentes parques animan a los visitantes y residentes a perderse en cada uno de los rincones pintorescos y reconocidos.
Por ello, en esta oportunidad vamos a darte a conocer cuáles son las 5 mejores rutas por la ciudad al vivir en Pamplona, para de esta manera disfrutarla al máximo y apreciar los mejores lugares que ofrece Pamplona.
Visita la plaza del Castillo
Cuando se camina por la calle Estafeta aparece a la derecha la Plaza del Castillo que es una de las más bonitas del norte de España. Dicha plaza es un centro neurálgico de la ciudad, el nombre proviene del castillo que se encuentra situado en la zona de la bajada de Javier.
La Plaza del Castillo está rodeada de coloridas y preciosas edificaciones del siglo XVIII, destacándose el antiguo casino, el palacio de Navarra, el Café Iruña que es muy famoso u el Palacio Goyeneche. En la parte central de la plaza hay un quiosco en el que las personas pueden subir y disfrutar de las vistas de los alrededores de la plaza.
Entra en la Catedral
La catedral de Santa María la Real se construyó en los siglos XIV y XV, donde anteriormente se encontraba un templo románico. Detrás se fachada al mejor estilo neoclásica se esconde un templo gótico que está presidido por la figura de Santa María, y en su interior se encuentra el sepulcro de Carlos III el noble y su esposa Leonor. Este es un espectacular claustro que se considera una de las cumbres del estilo gótico de Europa.
Si las personas visitan la catedral a las 11:15 pueden subir a la torre de la Campana y disfrutar de las mejores vistas de la ciudad de Pamplona, pero solo es posible subir a esa hora del día.
Recorre la Muralla
Al salir de la conocida calle Redín se inicia el recorrido por la muralla de Pamplona, que son 5 kilómetros señalizados totalmente con carteles en donde se puede apreciar datos históricos de la ciudad. Este es uno de los complejos militares renacentistas que mejor se conserva de Europa.
La ruta por las Murallas comienza en el Fortín de Bartolomé, que es un fortín o media luna elaborado en 1726 como un ambicioso proyecto. De forma didáctica y a su vez interactiva las personas pueden conocer las murallas y los elementos que la integran y no hacer todo el recorrido si no lo desean. Además, también se permite comprender toda la evolución de la ciudad a través de los siglos.
Lo mejor de la visita es dar un paseo por los jardines, ya que son preciosos y desde allí se ofrecen también vistas hermosas de la ciudad.
Haz una ruta de pintxos por sus calles
Vivir en Pamplona es ideal para realizar una ruta gastronómica es ideal para desconectarse de lo externo y conectarse con la mejor comida que existe. Por ello, no existe nada mejor que acercarse y degustar de los mejores pintxos de Pamplona en sus diferentes restaurantes y locaciones.
Los restaurantes del casco antiguo son perfectos y mantienen los platos fuertes de la localidad navarra sin hacerles ningún tipo de cambios, permitiendo que realmente se deguste de la gastronomía original.
La ruta gastronómica por los mejores bares o restaurantes de pintxos debe de comenzar en el Bar Gaucho, que una de las principales opciones para visitar en familia y amigos, ubicado en la calle Espoz y Mina en la Plaza Castillo, su especialidad es la cocina tradicional combinada con toques vanguardistas.
Para la segunda parada, tenemos el bar restaurante Baserriberri, que es un sitio joven e innovador que enamora a todo el que lo visita. Aquí los pintxos se combinan con la cocina creativa.
El último en nuestro top 3 es el Bar restaurante Iruñazarra, su ubicación y oferta gastronómicas lo convierten en una apuesta segura para visitar. Se encuentra ubicado en Mercadera, 15 a solo 200 metros de la Catedral de Pamplona, que lo hace muy céntrico y reconocido.
Pasea por los Jardines de la Taconera
Este es el parque más antiguo de Pamplona, el cual alberga un monumento al tenor Julián Gayarre y un café vienés. Los jardines son de estilo francés en donde se consiguen cuervos, patos y pavo reales.
Así mismo, el jardín es un pequeño museo al aire libre en el que sobresalen varias esculturas desde las alturas, y en el paseo central se consigue el Monumento nombrado anteriormente, una obra que se realizó en 1950.
En uno de los pasillos laterales se encuentra un busto que rinde homenaje a Hilarión Eslava, el compositor, y muy cerca se encuentra el Monumento a la beneficencia próximo al café vienés.
Este parque es perfecto para la visita de niños y jóvenes, ya que, junto a la Taconera, el parque de Antoniutti se encuentra dedicado a la práctica de patinaje y tiene una pista de velocidad y un espacio para hacer skate. Una visita imprescindible al vivir en Pamplona.
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