Antes de presentar un examen es común que los estudiantes recurran a largas jornadas de estudio, pero esto es una mala práctica de aprendizaje y de retener información.
El proceso de retención no depende del número de horas que se estudie, sino de la técnica de memorización que se emplee y del tiempo de recuperación entre sesiones. Esto quiere decir que es más una estrategia y no es cuestión de cantidad de tiempo empleado.
Por ello, vamos a compartirte algunos tips para tus estudios que te ayudarán a retener información y estudiar de manera eficiente, sin necesidad de hacer jornadas maratónicas de estudio.
Mapas y esquemas
Los mapas o esquemas son una representación gráfica que permite la sinterización de ideas a través de conexiones que ayudan a ordenar y asociar conceptos que se relacionan con el punto o tema central.
Este tipo de técnica de estudio ayuda a potenciar la capacidad de retención y organización de la información, mejorando la memoria, dando a la creatividad una importancia relevante. Un mapa o esquema requiere de las siguientes características:
- Usar palabras clave.
- La idea principal va en el centro, y las secundarias van alrededor.
- Se emplean líneas para la unión de ideas.
- Las imágenes tienen protagonismo para representar ideas, ayudando a retener información y muchos más conceptos.
Asociación y mnemotecnia
Las mnemotécnicas se forman mediante la asociación de los temas que deben memorizarse con ideas, objetos o elementos ya conocidos. Siendo el último mencionado la clave y aspecto importante de la memorización efectiva.
Esta técnica es muy útil, debido a que funciona como puente para aumentar las probabilidades de recordar algo. Lo ideal es que se cumplan con tres reglas esenciales: debe de ser sorpresiva o absurda, se debe sustituir lo que sea difícil de memorizar por una imagen más fácil de visualizar, la imagen debe de ser dinámica.
Lectura en voz alta
Involucrar los sentidos es una técnica ideal en la retención de la información, leer en voz alta implica que la vista y oídos participen en conjunto durante el proceso.
El acto de leer un texto de estudio en voz alta es una forma efectiva de memorizar, a diferencia de leerlo en silencio o escuchar que otra persona lo lee, pues en esta técnica se hacen dos cosas al mismo tiempo, y el cerebro procesa mucho más rápido el sonido de nuestra propia voz que el de otra persona.
Repaso en grupo
El repaso es una técnica de estudio que consiste en releer aquello que previamente se ha estudiado, cuya finalidad es la consolidación de los conocimientos y el reforzamiento del recuerdo de aquello que debe memorizarse.
Como objetivo, el repaso en grupo se trata reforzar los conocimientos importantes y compartir la información con compañeros de estudio, debido a que cada quien entiende algunas cosas a su manera, y compartir el conocimiento ayuda a retener y entender mucho más la información.
Una vez se tiene claro lo realmente importante, se deben determinar formatos o materiales adecuados para realizar un repaso en grupo adecuado de forma rápida y efectivo. Para ello se pueden realizar esquemas, resúmenes, mapas mentales, mapas conceptuales, etc.
Ejercicios prácticos
Para fortalecer la mente y retener información de manera adecuada se recomienda la práctica de juegos o ejercicios prácticos de razonamiento, que resulten agradables y entretenidos, existiendo muchas actividades lúdicas y divertidas.
En muchos casos, lo que es más fácil es la resolución de crucigramas, sudokus o sopas de letras, las cuales pueden hacerse con la información importante que se necesita estudiar, de esta forma la mente se activa con entretenimiento mientras va guardando toda la información que se desea.
Además, también existen juegos externos que ayudan en la habilidad mental como es el caso del ajedrez o las damas, cuya practica mejora y ayuda a la mente a mantenerse activa.
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